La misión de Tavis

Hola, gente bonita: 

Quiero contarles la historia de un héroe sin capa. Tavis Santiago Torres es un hombre naranjiteño de 26 años que le ha dedicado los pasados 11 años a servirle a los deambulantes. 

Desde muy joven fue misionero en su iglesia y viajaba a muchas partes del mundo para ayudar a los menos afortunados. Sin embargo siempre tenía en mente a esas personas que veía viviendo en las calles de nuestra isla. A los 14 años tuvo su primera interacción con un deambulante en el aeropuerto Luis Muñoz Rivera. Él se dirigía a una misión, de la iglesia, fuera del país.

Desde ese instante despertó su interés por ayudar a los más necesitados en nuestras calles. Cuando regresó a suelo boricua comienza a hacer su investigación de quienes eran, quienes los ayudaban, y como él podía ayudarlos.

Después de su investigación, decidió ir una vez por semana a repartir varios sandwiches a deambulantes de nuestro pueblo. Luego se convirtió en 3 veces al mes. Luego se movió a otros pueblos. Hasta que, sin darse cuenta, se convirtió en una misión 5 días a la semana.

Tavis terminó sus estudios en enfermería, aunque desde pequeño ha soñado con ser propietario de un negocio, la vida lo llevó por otro camino. Su interés lo llevó a buscar una manera de estudiar algo de su predilección, pero que principalmente que pudiera ayudar a sus amigos de las calles.

Dirigido en su misión ©Yaminé Maril 2017

Ya tiene sus rutas trazadas para los 5 días de la semana. Lunes y miércoles Tavis recorre las calles de Bayamón, Santurce y Hato Rey. Martes y jueves, él se mueve por Vega Baja, Vega Alta, Manatí y Barceloneta. Tres veces al mes visita Ponce, Adjuntas y Yabucoa. En esas rutas él lleva un sandwich de jamón y queso con un jugo o una botella de agua, y sobre todo, atención a los que él llama como los amigos de la calle. Además de eso hace curaciones de heridas, cambios de jeringuillas, regala abrazos y atención que son lo más importante.

Su familia ©Yaminé Maril 2017

Actualmente, Tavis atiende a más de 5,100 deambulantes mensualmente, entre hombres y mujeres. Muchos de estos deambulantes tienen perros callejeros como mascotas. Uno de los chicos en específico se rehusa a ir a centros de rehabilitación porque allí no le aceptarían a sus mascotas y las crías. En esta fotografía está una perrita recién paría con al menos 7 cachorritos. Su dueño no estaba en el momento que capturé la imagen, pero como se puede observar la perra está dentro de un corral de niños. Ellos cuidan a sus mascotas, dicen que esos perros se convierten en su familia.

©Yaminé Maril 2017

No todos, pero muchos de los que están en las calles son adictos. Esta es una mesa normal donde los adictos se curan. En ese momento los deambulantes no estaban, sin embargo no detuvo la misión de Tavis.

©Yaminé Maril 2017

La misma mesa luego de el paso de Tavis. Le dejó una caja de jugos y jeringuillas nuevas. Muchas veces ellos comparten jeringuilla en múltiples ocaciones. Al dejarle jeringuillas nuevas tienen la oportunidad de descartar las jeringuillas usadas y utilizar las que le lleva Tavis. Esto ayuda a la prevención de enfermedades entre los adictos. 

Palabras de aliento ©Yaminé Maril 2017

Tavis ha visto personas rehabilitarse y también dolorosas muertes entre sus chicos de las calles. Habla con mucho orgullo de los chicos que se han rehabilitado. Sobre todo, de una muchacha que estaba perdida en las calles, y ahora mismo tiene una vida digna.

A la hora de entrar a los centros de rehabilitación, los hombres son más reacios. Sin embargo, aunque las mujeres son más fáciles para acceder, necesitan saber el trasfondo histórico de el hogar a donde las llevarán. Tavis orientando a un hombre que quiere salir de las calles.

La Cura ©Yaminé Maril 2017

En una de las tantas conversaciones con Tavis me dijo: “Ellos me han enseñado el valor de la vida, de mi familia, ser agradecido, el luchar día a día, pero sobre todo la humildad y el respeto.”

Gracias, hermanito. No me canso de decirlo. Eres un héroe sin capa que no busca méritos sino una satisfacción personal. Tu misión es increíble y se que donde quiera que te pares buscarás la manera de ayudar a otros. Dios bendiga tu vida y te de mucha salud para continuar con tu misión.

Orgullosa de Tavis;

- Yaminé Maril Xx

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