Un Recorrido por el Holocausto
Hola, gente bonita...
Durante el "spring break" muchos jóvenes se van de vacaciones al caribe, a Florida o a cualquier lugar que puedan pasarla bien con un traje de baño puesto. Como ya he mencionado antes, soy rara. Yo arranqué para New Jersey (mi segunda casa). Mis tías me llevaron a unas vacaciones dentro de mis vacaciones y nos fuimos de “road trip" hasta Washington DC. Ocho largas horas de camino que yo pasé durmiendo.
Durante el "spring break" muchos jóvenes se van de vacaciones al caribe, a Florida o a cualquier lugar que puedan pasarla bien con un traje de baño puesto. Como ya he mencionado antes, soy rara. Yo arranqué para New Jersey (mi segunda casa). Mis tías me llevaron a unas vacaciones dentro de mis vacaciones y nos fuimos de “road trip" hasta Washington DC. Ocho largas horas de camino que yo pasé durmiendo.
Visitamos muchísimos museos y monumentos. La gran mayoría, sino todos, los museos de esta ciudad son gratuitos.
Fuimos al United States Holocaust Memorial Museum. Es impresionante por demás. Desde que tu entras se siente esta vibra bien pesada por todo el sufrimiento que vas a presenciar a base de fotos, videos y artículos.
El museo lo dividen por muchas secciones. Una de las partes más impresionante para mi fue una pared que estaba llena de dibujos de niños. En los dibujos, sin mucho detalle, se veía lo devastador de esos tiempos.
Una de las secciones del museo necesitaba un pase especial. Era totalmente gratis, pero necesitabas buscar el pase temprano en la mañana. Así que volvimos la mañana siguiente, tomamos el pase y entramos a la sección especial.
Definitivamente, valió la pena regresar el segundo día. Fue un recorrido por todo el segundo piso de el museo. Todas las paredes habían fotos o artículos utilizados por víctimas del holocausto. Libros prohibidos por Hitler. Ropa asignada a los judíos. Ropa de los soldados. Fotografías de la numeración de cada judío. Pura crueldad de parte de Hitler y sus seguidores.
Al salir de ese museo, mi mentalidad cambió. Me di cuenta de lo afortunada que soy de vivir en mi islita. Mi hogar, mi familia, no han sufrido como sufrió la familia de Anne Frank. Dios ampare a los sobrevivientes del holocausto y le de las fuerzas para compartir su historia. Que todos los que murieron a causa de este horrible movimiento descansen en paz.
Vivamos agradecidos de las oportunidades que nos da la vida. Debemos reconocer que somos bendecidos al tener comida y un techo donde ampararnos. Cada día respiramos aire fresco y; podemos ver el amanecer y el atardecer.
Seamos agradecidos,
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